miércoles, 8 de diciembre de 2021

El camino de Miguel Delibes

Como en casi todas las novelas de Delibes, en esta se oye el trino de los pájaros; se perciben todos los olores que exhala la Naturaleza, sean agradables o no, sean suaves o agresivos; se exhiben todos lo colores que nos regala el ámbito rural. Sus personajes respiran, sus corazones laten, aman y son amados, son valientes o sienten un insufrible temor mientras pululan de un lado a otro de sus hermosas páginas. En definitiva: ¡Son humanos! El Camino, es un canto a la infancia, a la amistad que en ella nace para no morir nunca o al menos dejar un indeleble reguero de recuerdos. Es una loa al esforzado y condescendiente ejercicio de los deberes paternos que nos impele al progreso, a alejar a sus hijos de las penurias e insuficiencias que los ha marcado de por vida constriñéndolos a un sufrimiento de cambiante intensidad. ¿Quién no guarda en un rincón de su memoria el roce de unos labios maternales o paternales rebosantes de amor y ternura? ¿Quién no ha sentido en su infancia el dolor de un amor inalcanzable, intangible, soñado, imposible? Mientras otro amor, a veces insospechado, aguarda en la cercanía, agazapado como un asustadizo cachorrillo. Todo esto late en el corazón de El Camino. Delibes, como todo gran escritor o escritora, pervive en su obra. Ahí radica la inmortalidad de los hombres y mujeres que plasman en hojas que un día fueron blancas, vacías y alguien llena de vida sempiterna.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Boabdil de Antonio Soler

Todo lo que ha escrito Antonio Soler me ha atrapado. Tiene una manera de narrar muy particular, descriptiva como una sucesión de imágenes qu...