Las constantes referencias de Stefan Zweig, en su autobiografía El mundo de ayer, sobre este autor me indujeron a su lectura. Impelido por la curiosidad lo leí. Sin embargo, no he disfrutado de su lectura, no he podido dejarme atrapar por la sonoridad de sus versos. Ha sido como tratar de disfrutar de un plato que promete exquisitos sabores y en él solo destaca uno de sus ingredientes, encubriendo las demás sapideces hasta arrinconarlas en un doloroso anonimato. Al final solo ha destacado la decepción.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Boabdil de Antonio Soler
Todo lo que ha escrito Antonio Soler me ha atrapado. Tiene una manera de narrar muy particular, descriptiva como una sucesión de imágenes qu...
-
El hombre comienza a asomar la cabeza. <<La adaptación del Homo habilis a los ecosistemas despejados y herbosos, las sabanas...
-
Es la primera de las obras que leo de el hasta hoy, para mi, desconocido autor colombiano. Me ha dejado una grata impresión. Nos cuenta la h...
No hay comentarios:
Publicar un comentario