miércoles, 21 de julio de 2021

El reencuentro

 

El reencuentro.
Encanecidos o alopécicos, de cabellos ralos o de canas disimuladas bajo el benévolo milagro de tintes que vienen en contrarrestar malignos vestigios depositados por el inexorable paso del tiempo. Tiempo que en su imparable y perverso avance ha consignado trazas intachables, barrigas prominentes, máculas en pieles otrora firmes y relucientes, llenas de juventud y belleza. Achaques que han venido a deteriorar una salud que parecía inalterable, inmarchitable. Lentitudes, movimientos tardos han sustituido agilidades y dinamismos. Recuerdos que renacen cada vez con mayores esfuerzos, de fondos cada vez más profundos e inescrutables.
Si, hemos cambiado tanto.
Pera la batalla de los sentimientos, es decir, aquello que aún es capaz de mantener un agradable vínculo entre nosotros, esa batalla la hemos ganado, por más que el tiempo se empecine en lo contrario.

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